Marta, mamá del grupo de lactancia y de crianza se ha tomado su tiempo para hablarnos de los pañales desechables. Ella los utiliza con su pequeño Carlitos y está muy satisfecha de su resultado, así que dado el desconocimiento que hay acerca de este producto nos ha preparado un excelente artículo para saber algo más sobre ellos.
PAÑALES DE TELA
Mucha gente se asusta al oír las
palabras “pañales de tela”. Debemos tener grabada en la memoria
colectiva esas enormes gasas cuadradas que se doblaban una y otra vez
y se sujetaban con imperdibles... O a nuestras abuelas frotando en el
río y golpeando contra las piedras. Pero lo cierto es que el mundo
de los pañales de tela ha cambiado mucho, especialmente en los
últimos años, y somos cada vez más las mamás que optamos por
ellos.
¿Por qué usar pañales de tela?
-Por razones económicas. Es cierto que
el uso de pañales de tela supone un mayor desembolso inicial de
dinero, mientras que en los pañales desechables se va comprando poco
a poco. El ahorro depende mucho del sistema de pañales de tela que
utilicemos, pero podemos gastarnos entre 100 y 600€ y no tener que
comprar pañales desechables nunca. Si ponemos una media de 8 pañales
al día el primer año (al principio serán más, al final serán
menos), a 0,15€ mínimo cada pañal (he elegido el precio de la
marca más barata del mercado), son casi 450€ por año y niño. Si
contamos con que se suele dejar el pañal a los dos años y medio, el
coste es más de mil euros. Si optamos por una marca como Dodot, esa
cifra puede incluso doblar. Y otro tanto por cada hijo que tengamos.
Los pañales de tela podemos reutilizarlos para distintos hijos, y
además hay un gran mercado de segunda mano en el que podremos sacar
algo de dinero cuando ya no vayamos a usarlos más. También es
cierto que al dinero que gastemos en pañales de tela, hemos de
añadirle lo que gastamos de electricidad y agua poniendo lavadoras
extras, pero aún así el ahorro es más que considerable.